
Caries y Dieta Alimentaria
La caries es una enfermedad infecciosa. El empastar los dientes afectados por la misma no es tratar la enfermedad, sino solo tratar la lesión. Para poder tratar de forma efectiva dicha patología no solo es necesaria la intervención del dentista sino la ayuda del paciente y de sus familiares, actuando sobre los factores etiológicos sobre los que podemos actuar, que son la dieta y la placa bacteriana. Para que lo podáis entender mejor, comparo la caries con la diabetes. El obturar los dientes sería como administrarle la insulina al diabético, pero solo con ello no es suficiente. Este paciente diabético no podrá comer y beber lo que quiera, tendrá que hacer ejercicio… así si se actúa a todos los niveles, esta enfermedad se podrá controlar. De forma similar ocurre en el paciente con caries, deberemos actuar en todos los niveles que podamos para así reducir su riesgo al mínimo posible.
Además informar que aunque los dientes de leche sean deciduos, es decir, que se pierden, es muy importante tener una buena salud en ellos, no solo para mejorar la calidad de vida de los niños, sino también porque los dientes permanentes que los sustituirán están formándose en estrecha relación anatómica con los temporales, adyacentes a sus raíces, y el proceso infeccioso puede transmitirse y afectar a los permanentes, siendo esta una afectación mayor , ya que están en proceso de formación y no del todo mineralizados.
Recomendaciones Salud Dental
- Reducir los alimentos azucarados del tipo chucherías, chocolates, galletas, bollería industrial… No se puede comer todos los días alimentos que contengan sacarosa. Es mejor comer 30 chucherias el sábado que una cada día de la semana. La frecuencia es muy importante.
- Reducir la ingesta de bebidas carbohidratadas y erosivas como zumos de supermercados, coca-colas, fanta… Los zumos naturales exprimidos en casa son mucho más recomendables que los comprados en supermercados y mejor si lo toman conjuntamente con otro alimento como un bocadillo que si lo toman de forma aislada.
- Reducir la ingesta de alimentos ricos en azúcares “camuflados” como el pan Bimbo o las papas fritas, chetos … los llamados “paquetes”. Mucho mejor comer bocadillos con pan convencional que con pan de molde.
- Evitar el picoteo. Se debe comer unas cinco veces al día. Cada vez que comemos algo, por insignificante que parezca, como podría ser una almendra, un trozo de chorizo… supone un ataque ácido para los dientes. Si son muchas las veces que esto ocurre a lo largo del día y de los días, se desbordará la capacidad tampón de la saliva y se producirán lesiones de caries en los dientes.
- Debe evitarse la ingesta continuada de salsas como el Ketchup por la gran cantidad de azúcares que posee.
- Debe evitarse la lactancia materna prolongada y el uso de biberones de forma también prolongada. Evitar la utilización de sustancias azucaradas en ellos como pueda ser miel y evitar que el niño se quede durmiendo mientras se lo toma, obviando así su higiene, y favoreciendo el proceso cariogénico que además mientras dormimos es más rápido ya que se segrega menos saliva
- Debe evitarse el uso prolongado del chupete y otros hábitos como pueden ser la succión digital y la interposición lingual que pueden llevar a maloclusiones del niño.
- Desde el momento que surge el primer diente, sobre los seis meses, e incluso antes, es recomendado la higiene oral, que en estas primeras fases puede realizarse pasando una gasita con agua.
- Deben evitarse acciones como la de besar a los bebes en la boca o comer de la misma cuchara que ellos, ya que con ese tipo de acciones se transmiten las bacterias de padres a hijos que producirán las caries
- Los padres o cuidadores deberán ser los responsables de la higiene del niño. Hasta los seis años aproximadamente deben ser ello solos los que se encarguen de la higiene oral del niño y de los seis a los diez- once años aproximadamente deberán supervisar y completar la higiene de su hijo.
- La utilización de pasta fluoradas deberá ser recetada por el odontopediatra, y deberán saber que con una dosis menor de 1000 PPM no existe ningún tipo de beneficio. Por ello advertir cuando se compre la pasta que con dosis menores de 1000 PPM no hay beneficio, no nos está aportando nada positivo. Además se debe evitar enjuagarse tras el cepillado para que el efecto de este flúor beneficie a la dentición.
- Desde el momento en que surge el segundo molar temporal y establece contacto con el primero debe utilizarse la seda dental, ya que con el cepillado no será suficiente para eliminar la placa interproximal.
- Importantísimo ir al dentista de forma habitual, con la frecuencia que él nos diga, y no esperar a que existan molestias para ir, porque como sanitarios, el papel fundamental es la prevención. La primera visita del bebe al dentista debe ser al año de vida.
- Acostumbrarse los padres a mirar los dientes de sus hijos y ante cualquier duda, al advertir cambios de color, desde manchas blancas hasta negras ir al dentista de forma inmediata.
En Clínica Dra. Mª José Oltra, tu dentista de confianza en Valencia, lo tenemos claro: una boca sana es una persona sana. Que como dice el dicho es mejor prevenir que curar y que si desde pequeños nos acostumbramos a tener hábitos saludables cuando seamos adultos no supondrá ningún esfuerzo cumplirlos.
En caso de que existan hábitos no saludables no hay que ser radicales en el cambio, es decir, por ejemplo, un niño que bebe tres zumos al día durante los siete días de la semana, no podemos forzarle a que deje de beberlo de golpe. Buscaremos primeramente que beba solo uno al día y durante alguna de las comidas, después que beba día si día no para finalmente que solo lo beba días festivos.
Javier Rangel López
Nº Colegiado 46003786